23 de julio de 1994
(Patmos)
Vassula de Mi Sagrado Corazón, Yo te bendigo.
Trátame como a tu amigo. Nunca abandones tu misión, que incluye el escribir. Dame tiempo para escribir, dame tiempo para verter sobre Mi altar1 Mis bendiciones, Mi mirra y Mi óleo de unción. Dame tiempo para cubrirte de Mi fragancia: el incienso.
Para apaciguar la ira de Mi Padre, pronuncia Su Nombre con honor y alabanza en las Asambleas. Yo te llamaré2 y tu deberás estar atenta a Mi llamada. Recibe Mi3 Paz ahora, piensa en Mí y guárdame en tu corazón4.
¿Amigos? Escúchame, recuerda siempre esto: el Mesías fue perseguido y tratado también como un impostor; también sus discípulos. ¡Niña! Tú procedes de Mí y, puesto que vienes del Mesías, también sufrirás como Él sufrió. No es que no te lo haya advertido antes, es sólo para recordártelo.