26 de julio de 1988

Mi Iglesia ha sido salvajemente herida, y pronto los Fundamentos de la Ecclesia van a ser sacudidos. A esto se seguirá la extirpación de todos aquellos que han causado Sus heridas y se han acumulado en Mi Cuerpo con la intención de dañarlo.

Sus Tribulaciones no han hecho más que empezar. Las murallas de Jerusalén se derrumbarán en un montón de polvo, para que Mi Nueva Jerusalén pueda ser reedificada. Soy Yo, el Señor, quien la construirá de nuevo. Renovaré sus murallas. La embelleceré para que podáis vivir todos bajo su Nuevo Techo, bajo un Nuevo Cielo y una Nueva Tierra. El Amor regresará a vosotros como Amor y vivirá entre vosotros. Yo seré vuestro Dios y bajo Mi Nombre viviréis todos en paz, y vuestro espíritu se llenará de santidad y de pureza.

Sí, Vassula, descenderé de lo alto como el Rayo para renovarla enteramente. Habrá muchas tribulaciones, porque han hecho de Mi Casa una desolación, la han saqueado. ¿Comprendes, Vassula? Es como el Dueño de una Casa que confía Su hogar a Sus servidores y estos, aún habiendo recibido órdenes estrictas de conservar Su Casa en orden y vigilar a los ladrones, han desobedecido Sus órdenes por indolencia y descuido. A Su regreso, encontrará que Sus criados están dormidos y que, durante su sueño, Su Casa ha sido saqueada y sus objetos de valor robados. Esos servidores desobedecieron y se rebelaron contra Sus órdenes y, por ello, serán tratados severamente cuando regrese el Dueño.

A Mi Regreso encontraré Mi Casa en ruinas y Mis Elementos Fundamentales desaparecidos. Encontraré a Mis corderos dispersos y muertos de hambre. Ah, Vassula, cuánto tendré que reparar…Espinas y zarzas han sustituido a las rosas y a los lirios que Yo había plantado con Mi propia mano. Han ahogado Mis flores, una tras otra. Con la ayuda de Satanás, han ido creciendo hasta rodear y atrapar a Mi Flor1. Se van acercando cada día y están ahora muy cerca de vejarlo y hacerle sentir su punzada venenosa. Esas espinas le van a asfixiar2. Pedro está atrapado y se encuentra impotente en medio de ellas.

¿Vassula?

Sí, Santa Madre.

(Vino Nuestra Señora.)

Créelo, pues todo eso está sucediendo. El Cuerpo de Mi Hijo sangrará aún más profusamente. El fin de Pedro está cerca. Falta el Amor.


1 El Papa Juan Pablo II.

2 Es interesante saber que el Papa, antes de morir, tuvo serios problemas respiratorios.