8 de junio de 1988

¿Jesús?

Yo soy. Te daré a entender lo que quise decir con la expresión que te trasmití hace unos días en uno de Mis Mensajes. Cuando dije que debías llevar Mis Antiguas Vestiduras al ir a ver1 a “Pedro”, era para significarte que Mi Evangelio no ha de cambiar, sino que debe ser predicado como Yo lo prediqué. Añadí que “Mis Vestiduras son Sencillas”, queriendo decir con esto que debéis acercaros al Evangelio y entenderlo como un niño, con una fe-de-niño.

Hoy día, Vassula, muchos sacerdotes no creen ya en Mis Misterios, de tal forma que no predican los Evangelios como deben ser predicados. Sólo están interesados en complacer a vuestra era y acomodarse a vuestra cultura. Estos sacerdotes llevan “vestiduras nuevas”, distintas de las Mías. Deben saber cuánto me aflige esto. Mi Evangelio debe ser predicado sin errores, y Mis Misterios han de seguir siendo Misterios.

Gracias, Señor. Gloria a Dios. Amén.


1 Profecía que se cumplió en noviembre de 2004.