15 de abril de 1994
(Me di prisa para estar de nuevo con Dios, aunque sólo fuera unos segundos. Llegué corriendo a Él.)
Ilustre Majestad: Te amo.
¡Ah, Vassula!, cada vez que te acuerdas de Mí, Me encanta. Yo, Yahveh, te bendigo, hijita Mía y Mi Propiedad. Yo soy tu Recurso… y Yahveh es Mi Nombre.