30 de octubre de 1989
Flor, Mi Amor te ofrece Su Don: Mi Pasión. Mi Pasión. Vívela y agrada al Padre como Yo Le he agradado. Te amo apasionadamente y ésta es Mi Manera de demostrar Mi Amor a las almas. Permíteme ser tu Guía y conducirte por la Vía de Mi Pasión.
Yo enseño a las almas a soportarla sin quejas, y doy a cada una según su capacidad. Vassula, aprende: para alcanzar la perfección sólo hay un Camino: el Camino de Mi Pasión, es decir, Mi Cruz. Sopórtala con amor, sopórtala con paciencia. Abrázate a Mi Cruz, hijita Mía, pronto se acabará todo y estarás junto a Mí. Adórame, adórame. Yo te bendigo.
(Más tarde:)
Señor, sálvanos por Tu Amor.
Que Tu Santo Rostro sonría a quienes Te aman.
Protector nuestro, ven a Tus Abeles,
Te necesitamos.
Ven, hijita Mía, permanece junto a Mí, desposada Conmigo. Comprende lo que te he ofrecido. Te he ofrecido Mi Corazón y Mi Amor. Desposada Conmigo, te ofrezco todo lo que tengo. Te ofrezco Mi Cáliz de vez en cuando, te ofrezco Mi Pan para que sigas viva y te ofrezco Mi Fragancia para recordarte Mi Presencia constante. Hija, Yo y tú permaneceremos unidos para la toda eternidad.
Ven.