17 de abril de 1992

Mientras que exhales Tu Aliento sobre mí
continuarás renovándome
y manteniéndome en pie.
Alienta sobre mí para que no muera, Señor.
Invade mi alma de Tu Luz.
Yahveh, Dios mío,
revestido de una impresionante Gloria,
bendito seas.
Amén.

Quédate en Paz. Permíteme conducirte como Me plazca. Te amo eternamente. No dudes nunca de Mi Amor.

Ven, hijita Mía, juntos tú y Yo, juntos en unión Conmigo, juntos ligados a Mi Cruz, juntos traeremos muchas almas de vuelta a Mí. Haz todo lo que puedas y Yo haré el resto.

Déjame utilizarte para Mi Gloria hasta el final. Deleita Mi Sagrado Corazón y sigue siendo nada. Que tu corazón sea Mi Cielo. Yo continuaré proveyendo a tu alma. Alábame a menudo y ámame. Ama el Corazón de tu Señor, ama el Corazón lacerado de tu Dueño. Deséame y ten sed de Mí, tu Rey. Despréciate a ti misma para que permanezcas en Mi Amor y no seas engañada. No mires a tu izquierda ni a tu derecha. Entonces realizaré obras aún más grandes a través de ti.

Yo te podo de vez en cuando, ¡pero he notado cuánto le disgusta eso a tu débil naturaleza! Todo lo que hago está hecho con sabiduría por la Sabiduría Misma. Por tanto, Vassula Mía, permíteme podarte de vez en cuando. Créeme, es necesario para tu crecimiento. Te he elegido para esta misión para que salgas a las naciones y des fruto. Sé lo frágil que eres y sé cuánto le gustaría a Satanás verte aniquilada de la faz de la tierra, pero Yo estoy a tu lado. Por lo tanto, no te quejes nunca y acepta de buen grado todas tus pruebas, con amor y con gran humildad. Con estas virtudes el demonio se verá desarmado y huirá. Nunca des pie al demonio.

Nadie ha captado todavía la anchura y la longitud, la altura y la profundidad de Mi Amor. Yo te quiero enteramente para Mí, sólo para Mí. Te estoy diciendo esto una y otra vez desde el principio, cuando te llamé. Yo te he desposado para Mi glorificación, a fin de que trabajes Conmigo. Ahora tu mente debe estar fija en Mí, y sólo en Mí.

Ora todo el tiempo pidiéndome todas las cosas que necesites. Sé obediente a los deseos del Amor para que todo el mundo vea que eres Mi discípula. Te he atraído a Mí para hacerte vivir una vida santa bajo Mi Luz. Recuerda:

tienes un solo Maestro y ése soy Yo;
tienes un solo Padre, y ése soy Yo;
tienes un solo Esposo, y ése soy Yo;
tienes un solo Amor, y ése soy Yo.

Te he enseñado a vivir con la Verdad y en el Amor para permitirte crecer en Mí. En otro tiempo Me ignorabas y eras esclava del mundo y de las criaturas, pero Yo, tu Creador, te he desprendido para que Me ames por encima de todo y de todos.

Hoy, Yo te pregunto: ¿eres feliz de estar Conmigo de esta manera?

Soy muy feliz, Señor. Tú lo sabes.

Te has convertido en objeto de pavor para Satanás, por eso ahora ves y sientes su furia. Cuanto más aumentaban tus frutos, más fuegos encendía él, acumulando falsedades y engaños para acusarte. Satanás lucha con el ángel que te he dado, amontona los fraudes contra ti. Sin embargo, a pesar de todo esto, ¿quieres aún continuar esta Obra Divina Conmigo?

Yo, Tu esclava por amor,
serviré a Tu Grandeza
y Tu Majestad hasta el fin.

Amadísima Mía, seguiré entonces conduciéndote con las riendas del Amor. Ven.