19 de junio de 2008

la paz esté contigo; hijita Mía, Yo soy Aquel que te resucitó para que cooperaras Conmigo; cada punto, cada sílaba pronunciada provienen de Mi Espíritu. Amo a Mi creación y Mi Misericordia sobrepasa el entendimiento humano; puedo hacer toda esta labor por Mí Mismo, pero me encanta cooperar y trabajar con Mis criaturas; al mismo tiempo, los que Yo elijo, me deleitan; son Mi delicia, el dulce aroma en Mis Atrios, pero también en la tierra, una señal de Mi Presencia; los santifico a medida que caminan Conmigo; si, son Mi lugar de descanso. Mis labios tiemblan de emoción cuando los miro avanzando en Mis Huellas manchadas de sangre; ¡después de todo fui Yo quien les dio la vida!

les he dado la vida para que den testimonio de Mi Resurrección, y con esto quiero decir que Me están presentando a este mundo muerto como un Rey glorioso que está dispuesto a perdonarlos; Me comunico con ellos de diferentes maneras, esperando atraer hacia Mí la mayor cantidad de almas que sea posible; sí Vassula, te he hecho cruzar fuego para que fueras capaz de establecer Mi Palabra en ti; por lo tanto, no Me niegues nada; ¿acaso te he negado Yo algo? en efecto, he dado Mi Vida por ti.

hija, todo lo que Me has ofrecido con amor ha sido utilizado por Mí;

– Te he mandado que les digas todo lo que Yo te he dicho y escrito; no tengas miedo; no omitas nunca ni una sílaba; algunos escucharán; otros te ridiculizarán; otros discreparán y pelearán contigo; proporciónales a todos Mis Mensajes; las buenas noticias deben salir por toda la tierra y Mis Palabras deben llegar a los confines del mundo; muchos volverán a Mí y abandonarán sus delitos.

– Mediré a cada alma con una vara de medir; ellos 1 han corrompido su sabiduría y, con medidas fraudulentas, han excluido Mi Ley; pero cosecharán lo que han sembrado; nadie entra en el Cielo si no Me busca; los que reprenden Mi Ley, me están reprendiendo a Mí, y se convierten a Mis Ojos en una abominación 2; ic


1 Los anglicanos que aceptan el liberalismo, no la High Church ni los conservadores.
2 Rm 1, 18-32.