7 de julio de 1995
(Joinville, Brasil)
Vassula Mía, Yo, Jesús, te doy Mi Paz, ¡esta Paz que nadie debería quitarte!
Ten cuidado con los conflictos que brotan en tu entorno para perturbar la armonía que te he dado y el flujo de paz que Mi Obra te da. Ahora escucha y toma esto como consejo Mío: trabaja como siempre has trabajado Conmigo. Mi Obra se realiza en paz, armonía y alegría. Me deleita encontrar tu corazón bien dispuesto y ansioso de agradarme. Camina Conmigo y permite que te hable Mi Corazón. Cuando Yo hable, escribe Mis Palabras como lo has hecho. Y, a medida que escribes, Yo te bendigo a ti y todo lo que escribes. Ámame y Yo Me siento alabado y honrado con tu amor.
—Ámame y consuélame.
—Ámame y nunca perecerás.
—Ámame y Yo uniré Mi Iglesia con tu amor.
—Ámame y, en atención a tu amor, la ira de Mi Padre puede disminuirse.
—Ámame y únete a las oraciones de los santos.
Todo lo que pido de todos vosotros es amor. Todo lo que necesito de todos vosotros es vuestro corazón. Necesito vuestros corazones para construir la unidad en vuestros corazones. Vassula, ¡necesito sacrificios para unir a las Dos Hermanas!1
Flor, Yo te digo que durante tu misión en Brasil he recibido honor y alabanza. IC.
