18 de diciembre de 1994

¡Señor! Me has hundido
en las profundidades de la Noche,
en lo más oscuro y más profundo,
me has sumergido.
¿Por qué me escondes Tu Rostro?
¿Cómo puedo oír la maravilla
de Tu Voz en la oscuridad?
Extiendo las manos
buscando a tientas Tu mano,
buscando la orla de Tus vestidos,
pero no encuentro donde agarrarme.

Mi Amor por ti no tiene límites. Si estás atravesando los terrores de la Noche, no temas… Vassula Mía, Yo estoy contigo. Yo estoy contigo. Saco consuelo de tu angustia, tú eres Mi consuelo, Mi cabezal y Mi jardín. Que tu corazón languidezca de nostalgia por Mí.

No envidies lo que te rodea y no permitas que tu corazón hable sin sentido. Viniste a Mí por fe, ¿qué mayor prodigio entre todos los prodigios? Te digo que tendrás tu recompensa al final. Te he nombrado Mi Eco para que repitas varias veces las palabras que Yo pronuncio. ¿Estás haciendo de verdad todo lo que puedes para agradarme y servirme?

Si lo hago es gracias a Tu Espíritu de Gracia.

Mira, hoy te he enviado a muchas naciones para ser Mi Eco y reavivar Mi Iglesia, para unir y embellecer Mi Iglesia. Mi reino en la tierra está cerca y, para socorrer a Mi rebaño, necesito sacrificio, generosidad y amor… Míralo tú misma, ¡qué leves han sido tus esfuerzos para ganar tantas almas! Yo te garantizo que, dejando tu alma sumida en los terrores de la Noche, estoy ganando muchísimas almas. Sí, gracias a tu aceptación, puedo ahora disfrutar aún más de Mi jardín.

Esposa Mía, Yo soy Rey en ti… Niña-de-Mi-crianza y formada por Mis Divinas Manos, Yo te digo: Mi Iglesia estallará un día en gritos de alegría, porque, por Mi eterno amor, voy a acabar con esta Apostasía más rápido de lo previsto.

Sin embargo, no ha llegado lo peor…

Lo peor tiene que llegar, nada puede realizarse de repente. Mi Padre revelará Su Mano Poderosa a los pobres, pero a los apóstatas y al Rebelde, un huracán de fuego procedente del este los abrasará, debido a todas las cosas abominables que han hecho… El culpable morirá por su delito. Si se convierte antes de Mi Día y repara lo que ha estado destruyendo, y reconoce su pecado, Yo le perdonaré y él vivirá, y no morirá. Ésta es Mi Ley tres veces Santa.

(Más tarde:)

(Mensaje para Argentina)

Escribe: ¡Argentina! ¡Argentina, eres Mía! Abre tu corazón, no tu mente. Alza tus ojos al cielo y verás Mi gloria, Mi esplendor y Mi soberanía. Pero mientras tengas fijos los ojos en el mundo, no verás la grandeza de Mi generosidad que está siendo derramada en ti para salvarte… No Me cansaré de cortejarte, porque he tomado en consideración tu acto caritativo1, que se ha llevado hasta dónde has podido.

Vengo a decirte que el Dios que tú has olvidado, nunca te ha olvidado a ti. Aunque sólo Me conocías por fuera, eres bienaventurada. Hoy te invito a Mi mesa. Ven y deja que nos encontremos corazón a Corazón, y te beneficiarás de las Riquezas que te ofrece Mi Sagrado Corazón; sin ellas2 no puedes vivir.


1 La generosidad y la fidelidad que Argentina mostró hacia las apariciones de San Nicolás.
2 Jesús estaba hablando acerca del misterio de la Eucaristía.