25 de julio de 2024

Mi Vassula:

Regocijaos, sed dichosos porque Yo, Yahvé, he estado a vuestro lado instruyéndoos; regocijaos por el amor que os tengo y las maravillas que he hecho; he compuesto un cántico nuevo para todos vosotros, inclinando el Cielo para descender hasta vosotros, y tú, tú que todavía te escondes en un rincón oscuro, lamentándote de que no haya nadie que te ofrezca su amistad, o se preocupe por ti, ¡no dejes que muera tu espíritu!
Yo no soy un extraño que te pasa de largo, porque debo recordarte que eres Mi amado y que Me preocupo por ti; Mi canción es para ti, alma querida; por lo tanto, nunca digas: “Dios nunca se fijará en mí”; Yo siempre he estado contigo, a tu lado; ¡ven! ven, aguarda un momento, no tengas miedo, Yo estoy a tu lado; ¡ven a poner tus pies en Mi camino, y no Me temas, confía en Mí y serás bendecido! Bienaventurado el hombre que escucha el clamor de los desdichados y se ocupa de los pobres y de los necesitados;

Vassula, te he mostrado Mi favor, acogiéndote en Mis Atrios celestiales para que crezcas co
Vassula, te he mostrado Mi favor llevándote a Mis Atrios celestiales para que crezcas como un olivo; he abierto tu mente para que escuches Mis instrucciones y aprendas de la Sabiduría; hoy vengo a infundir en ti un poco de alegría y, renovando tu alegría, mantendré tu espíritu dispuesto a seguir sirviéndome;
ya sé, ya sé cuánto ha meditado tu espíritu sobre Mí todo este tiempo, pidiéndome permanecer cobijada bajo la sombra de Mis Alas, y así ha sido; te cubrí bajo Mis Alas, te sumergí en Mí, en lo más hondo de Mi Corazón;
oye, recuérdales a todos que Yo, Yahvé, soy conocido por escuchar siempre a los necesitados y a los que Me buscan con fervor; recuérdales que estoy cantando para ellos un cántico nuevo; un cántico que muestra Mi Amor y Mi Misericordia, que muestra Mi fidelidad;

en el pasado, cuando Moisés y Aarón me invocaron, Yo les respondí desde una columna de niebla, acudiendo a ellos de esta manera; hoy hago oír Mi Voz a través de portavoces de Mi elección;
antes de que fuesen creadas las montañas, y antes de que naciera la tierra con sus habitantes y se formase el mundo, Yo ya había imaginado Mi Tema de Amor para vuestros tiempos, sí, la Verdadera Vida en Dios, este Tema Real, entonces ¿por qué dudas aún, criatura? tú que dudas, ¿nunca has oído hablar de las grandes hazañas que realicé en el pasado?

Te doy gracias por haberme escuchado; Te doy gracias por haberme elevado, sí, sin duda mi alma está invadida por un incesante anhelo de estar cerca de Ti, Yahvé, mi Padre; sonríeme, sonríenos y líbranos del mal;

deliciosa niña, en Mí se encuentran la Misericordia y la Redención; comprenderme es el conocimiento dado al corazón puro; conocerme te une más estrechamente a Mí; ¡Me regocijo cuando me invocas como “mi Padre y mi Dios”!; escúchame:
se acerca el tiempo del regreso de Mi Hijo, el Día de oscuridad y tinieblas está más cerca de lo que creéis; el fuego devorará los pastos y los árboles, los cielos temblarán, el sol, la luna y las estrellas perderán su brillo, nadie escapará a ese Día;

¡arrepiéntete! y vuelve a Mí de todo corazón, generación, para que Yo te perdone; vuelve a Mí y Yo, que soy rico en bondad, te perdonaré; te perdonaré si te arrepientes; escúchame; deja pasar un año o dos y todas las visiones que has visto, hija Mía, serán reveladas, las visiones que eran como un libro sellado e incomprensible, serán reveladas; sí, en poco tiempo, menos de lo que crees, muchos de los que ignoraban Mi Mano Misericordiosa intentarán huir, pero Yo los perseguiré, no para castigarlos, sino para ser clemente con ellos, por compasión;
pronto mostraré Mi furia a las naciones que se volvieron contra Mí: Mi resplandor será semejante a un fuego devorador; Mi aliento, como una lluvia de granizo ardiente consumirá todo a su paso; las cavernas se derrumbarán y los refugios subterráneos quedarán aplastados, sin dejar que nadie se salve en su interior;
ofrece tus oraciones desde hoy, ofrécelas por el remanente que quede, porque la arrogancia de los hombres será humillada y el resto que sobreviva producirá buenos frutos.¹

¡Dios mío!, ¿no es demasiado duro?

Me abruman mucho, Vassula, incluso algunos de los que guardan la Iglesia no han seguido las Instrucciones de Mi Hijo; no puedo soportar su rencor e inflexibilidad en lo que respecta al trabajo por la unidad; no los puedo soportar, no aguanto su apatía hacia Mis Llamados Misericordiosos;

Mi Palabra de hoy no significa nada para ellos; todavía hasta hoy no han sentido ni contrición ni temor; ¿Cómo no voy a volver Mi rostro contra ellos, cuando algunos sutilmente hacen compromisos con sus gobiernos y muestran de Mí una caricatura de un dios? Lo sé todo sobre su presunción, ¡oh, sí! ¿no sabes que cuando un justo renuncia a su integridad y peca, muere por eso, y que, a la inversa, cuando un malvado renuncia a su maldad y se arrepiente, vive?
hoy esta generación reclama Justicia sobre sus cabezas, a causa de sus inmundas prácticas; pero pronto todo esto terminará, porque el Retorno de Mi Hijo, despreciado por el mundo y odiado por los poderosos, descenderá sobre ellos, y la tierra temblará, mientras que los pueblos que adoraban a Mi Hijo vendrán a recibirlo y se postrarán; porque el Señor tendrá misericordia de los que invoquen Su Nombre.