26 de julio de 1989
(Dentro de la gruta del Apocalipsis, en el mismo lugar donde se posaron los pies del escriba mientras escribía, puse yo mi cuaderno y recibí el Mensaje del Señor.)
¿Señor?
Yo soy. No lo dudes jamás. Yo Estoy con vosotros ahora y hasta el fin de los tiempos y para siempre.
¿Señor?
Yo soy. El Amor está cerca de vosotros, no temáis. Venid. Todo lo que os pido es Amor, un Amor correspondido. Mi Paz es vuestra, tomad Mi Paz para que podáis dársela a otros. Dejad de obrar el mal.
¡Uníos! Uníos y sed uno, como Yo y el Padre somos Uno y lo Mismo.
Paz… Paz, venid a hacer las paces Conmigo. El Amor os está llamando ahora.